El documento habla sobre el Octavo Congreso Nacional de Arrecifes Coralinos que tuvo lugar recientemente en el Centro Universitario de la Costa en Puerto Vallarta, Jalisco. En el congreso se presentaron estudios sobre los arrecifes coralinos y los riesgos que enfrentan debido a factores como huracanes, sedimentación y actividades humanas. Los arrecifes coralinos son ecosistemas marinos frágiles construidos por corales que albergan gran biodiversidad.
1. HÁBLAME DE ARRECIFES CORALINOS
René Chargoy Guajardo
Recientemente en el Centro Universitario de la Costa en Puerto Vallarta, Jalisco,
campus de la Universidad de Guadalajara, tuvo lugar el Octavo Congreso Nacional
de Arrecifes Coralinos. Durante cuatro días, del 19 al 22 de mayo, se presentaron
los avances y resultados de diferentes estudios sobre estos ecosistemas marinos
que están en riesgo de verse mermados o desaparecer, debido a los frecuentes
huracanes en el Caribe y en el Pacifico mexicanos, o bien por la presencia de
sedimentos en el agua, lo que reduce la cantidad de luz que les llega a los corales
y a sus algas, reduciendo con esto su productividad.
Un hecho incontrovertible es que el riesgo se incrementa de manera significativa y
preponderante a causa de factores antropogénicos, es decir, donde la mano del
hombre interviene directamente en la degradación de los arrecifes coralinos.
Claramente esto sucede con la sedimentación, la pesca y la extracción, actividades
humanas que se realizan con poco cuidado, menos control y cada vez mayor
abuso.
Los arrecifes coralinos son ecosistemas marinos construidos por animales en los
océanos. Los corales que forman los arrecifes son especiales, porque dentro de su
tejido poseen algas, que llevan a cabo la fotosíntesis. Suelen vivir a poca
profundidad en los mares tropicales, donde el agua es limpia. Poseen un esqueleto
calcáreo, es decir, parecido al cemento. Deben vivir sobre un fondo duro, porque de
otro modo pueden quedar despedazados.
Los arrecifes coralinos son como un bosque que está debajo del agua. Otra imagen
igualmente válida es la siguiente: son como edificios en donde viven muchos otros
animales y plantas. Si el coral se daña se empieza a derrumbar dicha estructura y
mueren todos los organismos que allí habitan.
2. Conocer, cuidar y proteger los arrecifes coralinos no es tarea exclusiva de los
biólogos marinos, sino que compete a todos de manera diferenciada. En razón de
ello, un Congreso dedicado a la presentación de los avances y resultados en la
investigación de los arrecifes coralinos, ayuda a revisar las actuales condiciones en
que se encuentran tales comunidades ecológicas, específicamente las que se
sitúan próximas a nuestros litorales.
En el primer día de este evento académico, el Dr. Héctor Reyes Bonilla, de la
Universidad Autónoma de Baja California Sur, hizo una reseña histórica de la
investigación en arrecifes coralinos en México, mostrando que la misma es una
actividad académica que se origina de forma más sistematizada en los años
cincuenta del siglo pasado. Aunque es poco el tiempo transcurrido en ese quehacer
interdisciplinario, se ha logrado conocer la composición de las estructuras
geológicas de los arrecifes, así como las características de la especies de coral
hasta ahora detectadas, además de la diversidad taxonómica y funcional de las
comunidades de peces arrecifales.
A lo largo del Congreso se describieron brevemente algunos estudios, en donde se
evaluaron las condiciones de arrecifes situados en nuestras costas, se habló de su
distribución y de cómo ha sido posible su supervivencia y crecimiento, en algunos
casos, así como de sus afectaciones por la presencia de especies invasoras.
Particularmente, se llamó la atención respecto a la manera en que la producción de
mayores cantidades de dióxido de carbono, por la emisión de gases tóxicos en el
aire, ha incidido negativamente en la modificación del PH de nuestros mares, lo cual
provoca su acidificación, y consecuentemente que se alteren los ciclos
reproductivos de los corales y sus tasas de crecimiento.
En este octavo Congreso, organizado por la Sociedad Mexicana de Arrecifes
Coralinos, y en el que el Dr. Pedro Medina como presidente de la misma se mantuvo
atento a su desarrollo y conclusiones, se hicieron señalamientos muy precisos sobre
3. qué causa las enfermedades en los corales, cuál es su estado de protección, cómo
el estrés térmico agrava el efecto de acidificación de océano en algunas especies,
y de qué forma se puede implementar un programa de monitoreo permanente en
los arrecifes.
En otra de las conferencias magistrales, la doctora Susana Enríquez Domínguez,
del Instituto de Ciencias del Mar y Limnología de la UNAM, de la Unidad Académica
de Sistemas Arrecifales en Puerto Morelos, Quintana Roo, estableció una analogía
entre plantas terrestres y los arrecifes, animales subacuáticos, los cuales vienen
siendo un ecosistema dentro de otro ecosistema.
La investigadora, de origen español, comentó los aportes de la fotobiología al
estudio de los corales. Señaló que es fundamental para los sistemas de los corales
absorber la suficiente luz que les permita crear la energía para su supervivencia.
Refirió que la fotobiología se encarga de estudiar y explicar, con evidencia empírica,
la absorción de fotones, proceso de reflexión de la luz en el cual la forma del coral
mucho tiene que ver, pues se da de manera distinta en corales planos que en los
ramificados. La fotobiología trata de entender cómo a través del mecanismo de la
fotosíntesis, los arrecifes de coral son capaces de utilizar la energía lumínica para
fijarla en su organismo.
Para estas investigaciones tan especializadas se utiliza un espectrofotómetro,
instrumento que tiene la capacidad de proyectar un haz de luz monocromática a
través de una muestra. Con su aplicación es factible medir cómo se refleja y
absorbe la luz en organismos como los arrecifes de coral. Otro instrumento que
también se emplea es el fluorómetro, el cual sirve para detectar la fluorescencia
del organismo monitoreado.
A partir de estos y otros estudios se evidencia que algo no muy conveniente está
pasando en las lagunas arrecifales. Es momento de tomar conciencia de que
tenemos un patrimonio natural que se viene deteriorando de manera acelerada.
Este es un llamado no sólo de una investigadora muy reconocida en su campo, y
que sabe perfectamente de lo que está hablando, sino de una comunidad de
4. científicos que quieren alertarnos sobre cómo enfrentar un problema ambiental de
tan extensas dimensiones, como éste que implica la protección y preservación de
los arrecifes coralinos. El abordaje es diverso, y hay que hacerlo sin perder más
tiempo desde la ciencia, la política ambiental, la cultura y la educación, la economía
y las leyes.
Bienvenidos congresos y debates académicos como el parcialmente aquí reseñado.
Los primeros pasos para crear una cultura de los arrecifes coralinos están dados.