Esta semana cerca de medio millón de personas vieron el programa del Sense Ficció emitido por Televisió de Catalunya titulado «Los espías ya no son lo que eran» (Els espies ja no són el què eren). Esto demuestra cierto interés por parte de la sociedad catalana en la cultura de inteligencia, seguridad y defensa; una cultura, sin embargo, de la que vamos bien faltos históricamente.

1. Viernes, 13 de enero de 2017
ESPÍAS Y ANTICIPACIÓN
Rubèn Novoa
http://www.twitter.com/rnovoa
Esta semana cerca de medio millón de personas vieron el programa del Sense
Ficció emitido por Televisió de Catalunya titulado «Los espías ya no son lo que
eran» (1). Esto demuestra cierto interés por parte de la sociedad catalana en la
cultura de inteligencia, seguridad y defensa; una cultura, sin embargo, de la que
vamos bien faltos históricamente. El Once de Septiembre es un leit motiv bien
clarificador. Y es que los países con cultura de defensa, celebran victorias no
derrotas! Mientras tanto, los catalanes, llevamos más de tres siglos erráticos
faltos de esta cultura tan necesaria para vivir en un entorno con riesgos
geopolíticos y geoestratégicos crecientes como el nuestro. Este año, decidí
recordarlo con una retahíla de tweets explicando cómo, también en 1714,
Cataluña perdió la guerra de inteligencia (2).
Este interés creciente por parte de la sociedad en la inteligencia, la seguridad y
la defensa se constata en la misma web de la Policia de la Generalitat-Cos de
Mossos d’Esquadra, donde el apartado más consultado por la ciudadanía es
precisamente la «alerta antiterrorista» (3). Así pues, el documental de
Montserrat Besses ha sido una apuesta inteligente por parte de los Servicios
Informativos de TV3 a los que tanto critico. Estuvo bien enfocado y se dio una

2. visión más que aceptable a la ciudadanía de lo que se denomina «Comunidad
de Inteligencia» y que tanto secretismo rodea. A modo personal sólo diré que
se tenía que haber rematado el documental con las demandas que desde
Cataluña se llevan haciendo reiteradamente de incorporación plena de los
Mossos al CITCO y EUROPOL, como ya defendí hace tres meses en este artículo
periodístico (4).
El debate que se generó en redes puso de manifiesto la evolución del concepto
de espía desde la Guerra Fría, las necesidades imperantes de coordinación entre
servicios ante la amenaza yihadista que vive Europa, y, como muy
acertádamente apuntó la Confederación Española de Policía de Tarragona en
Twitter, el papel clave del analista de inteligencia en todo ello (5). Esto es
debido a que éste actúa como una especie de intermediario entre la realidad y
el «decisionmaker». Su trabajo es recibir todo tipo de datos (que pueden ser
ciertos o no) para someterlos a análisis, esto es, evaluarlos a la vez que se
construye un relato interpretativo que sigue un juicio lógico establecido. Y todo
ello teniendo presente que las prioridades en inteligencia, seguridad nacional y
defensa no vienen determinadas por el analista sino por las prioridades
estratégicas marcadas por el jefe de Estado o gobierno de turno.
Esta anticipación que se reclama a los servicios de información y de inteligencia
cuando hay una tragedia en Europa en forma de masacre terrorista requiere de
nuevas formas de trabajar cooperativas ( «joint intelligence task forces») y, sobre
todo, de recursos para parte de las administraciones en el fomento de análisis
prospectivos de inteligencia innovadores que sirvan para tratar de coser los
«agujeros en la raqueta» de los que se alertó en el Sense Ficció.
Pondré un ejemplo de la utilidad de dichos análisis para contribuir a mejorar la
seguridad de todos: El pasado mes de noviembre Israel experimentó una nueva
táctica en cuanto a ataque terrorista islamista se refiere en forma de grandes

3. incendios. Mediante una metodología de análisis
«red cell» (6) generé una inteligencia estratégica que afirmaba que «Si se
detectaran en Europa indicadores que esta táctica terrorista pretende ponerse
en práctica sería conveniente reforzar los equipos de respuesta rápida y de
emergencia de las áreas señaladas». El análisis en cuestión se refería a tres
zonas de interés en Cataluña. Un par de meses después, la revista del DAESH
Rumiyah #5 anunciaba a bombo y platillo como hacer «napalm casero» y
quemar Europa.
Anticipación a grandes rasgos vendría a ser ésto precisamente: saber dos meses
antes que tu enemigo la táctica terrorista que va a adoptar por si la pretendiera
poner en práctica contra ti, y los que velan por nuestra seguridad, al haberlo
previsto, evaluado y estudiado con anterioridad, sabrán cómo neutralizarte.
Rubèn Novoa i Arranz
(1) https://twitter.com/tv3cat/status/819094830030684160
(2) https://twitter.com/i/moments/786339285490282496
(3) https://twitter.com/rnovoa/status/815309617110667264
(4) http://opinio.e-noticies.cat/la-punteta/mossos-citco-i-europol-106084.html
(5) https://twitter.com/cep_tarragona/status/818943237478088704
(6) http://foreignpolicy.com/2015/10/30/inside-the-cia-red-cell-micah-zenko-red-team-
intelligence/